En Robots School, apostamos por un aprendizaje activo, donde niños y mayores son los protagonistas de sus propios logros y avances.
Es muy importante para el desarrollo de nuestra actividad fomentar el “aprendizaje por descubrimiento”, donde a través de la intuición, imaginación y juego deductivo, la persona consigue su objetivo. Nuestros educadores en robótica están preparados para ello, para acompañar al usuario en la búsqueda de respuestas y alternativas ante las distintas posibilidades que puedan surgir, facilitando que sea el propio alumno el que elabore el camino hasta alcanzar su propósito en lugar de dirigirlo mediante guías o manuales.
También trabajamos de base lo que conocemos por “inteligencia emocional”, pues no podemos desligar las emociones y los estados anímicos de la persona que está creando, que está construyendo. Se trata de un juego, que a su vez nos permite proyectar y plasmar de forma creativa aquello que sentimos, además de explorar nuestros propios límites y capacidades, gestionar la frustración y buscar soluciones para alcanzar nuestro objetivo. Gracias al tipo de pedagogía que aplicamos, el alumno logra un autoconocimiento mucho mayor, identificando sus aptitudes y puntos fuertes y trabajándolos para desarrollarlos al máximo.
Se trata de un aprendizaje significativo, donde prima una pedagogía práctica, activa y adaptada a las competencias de cada usuario. Por lo que la actividad se puede adaptar para todo tipo de personas, repercutiendo sus beneficios en cada una de ellas.
Así por ejemplo, en niños pequeños fomentarem
os el pensamiento lógico deductivo, la creatividad, cooperación y trabajo en equipo, en niños con algún tipo de discapacidad física (problemas de hipotonía o espasticidad) trabajaremos la psicomotricidad fina y gruesa y la integración en el trabajo en equipo. En niños con dificultades de atención y concentración, trabajaremos las secuencias y la focalización en una meta para captar su atención, o incluso con personas mayores, podremos trabajar habilidades psicomotrices, de memoria y mejora de sus propias capacidades.
“Enseñar no es transferir conocimiento, es crear la posibilidad de producirlo” (Paulo Freire. Pedagogo)
